Casualidades de la vida, éste es el primer año que he trabajado con un retusa, que no era mío. Y ahora resulta que tengo uno. Se lo dieron a una amiga mía, y como ella no es capaz ni de cuidar a un cactus, ha decidido regalármelo para que, al menos, se mantuviese vivo. Y como en Burgos las temperaturas son suaves pero cálidas, decidí trasplantarlo (fue la primera semana de julio) y darle una poda radical. Espero que viva pues fui drástico, pero al menos esquejé varias ramas para seguir "manteniendo" vivo a este ejemplar (o a una parte de él). Como imaginaréis, es el típico en forma de S. Y esto hice.
Un lado
El otro lado. Se aprecia la mala calidad del sustrato.
Éste era el sustrato. Lavé las raíces con agua y corté las que sobraban. No hice fotos porque esto ya está muy documentado.
Y ya trasplantado. A partir de ahora, si todo sale bien, empezaré a trabajarlo. Con los esquejes iré aumentando el nebari de forma ordenada, para darle una sensación de naturalidad (de los ficus, claro).
El mayor reto que se me presenta con este árbol es, sin duda, cómo pase el invierno. Estará cerca de una ventana (al otro lado de la misma, exactamente, y en una habitación no muy cálida, ponemos la calefacción a menos de 20ºC, así que supongo que no debería haber problemas porque se reseque mucho el ambiente. Agredecería consejos sobre esto, pues en cultivo en interior (aunque sea de ficus) no tengo experiencia.
Un saludo
No te preocupes por el cultivo en el interior de los ficus, salvo por la humedad. La calefacción reseca siempre, pero pulverizando agua de vez en cuando ya va bien. Digan lo que digan, he experimentado con exterior e interior para los ficus y desde noviembre a marzo, están mejor dentro de casa. Supongo que hay que experimentar para hacerse una opinión propia, y esa es la mía. Un saludo y sigue así con el blog!
ResponderEliminarOscar