Más de uno ya me ha preguntado al correo sobre el pinzado de juníperos, así que voy a explicar lo que me enseñaron. Lo primero de todo, NO soy ningún maestro ni nada de eso, y si mi experiencia en bonsai es poca, con los juníperos aún menor. Tengo un chinensis desde hace dos años, al cual esquejé y me quede con uno de ellos; luego una sabina rastrera desde octubre del año pasado y dos itoigawas, uno creciendo (es de acodo) y el otro recuperándose, obtenidos hace poco por algún cambio. Así que, puede que algo o todo esté erróneo, pero es lo que tengo asimilado y bueno, si al exponerlo alguien con más exeriencia me corrige no haré más que darle las gracias y aprender de él.
El caso es que ayer cogí a mi junípero, y le saqué unas fotos. Hará unos dos años le hice ese pinzado mal hecho, os mostraré primero sus resultados. Lo que tiene ese tipo de pinzado es que quita el vigor al junípero y lo desgasta mucho, dejándole un par de temporadas o más recuperándose. Por lo que no es nada recomendable.
Un brote de mi junípero (no es itoigawa).
En azul, brotes vigorosos. En rojo, brotes pinzados hace dos años por el mal método: aún no han brotado.
Rama para practicar.
Ejemplo de mal pinzado: se cogen con los dedos los brotes terminales de la rama, se pellizcan y se tira.
Resultado: todas las yemas terminales y, por tanto, las más vigorosas, destruidas. Luego les cuesta mcuho reponerse.
Otro brote. Fijaros en las puntas, verdecitas, brotes nuevos. Símbolo de que no se le castigó en exceso.
Buscamos la silueta verda (por ejemplo). Sólo corto los brotes que se salen de ella, dejando al resto sin tocar. El árbol rebrotará de más atrás por las yemas terminales que queden sin desgastarse mucho.
Queda esto. Fijaros en que tiene yemas terminales sin tocar, redondeadas (es la forma del brote de los juníperos de escama). Cuando las cortas, quedan en forma de V hacia dentro.
Y esto ha sido todo, pero recuerdo; mi experiencia en bonsai con juníperos es muy escasa, así que si estoy equivocado, lo siento, espero que llegue alguien y me lo corrija. Si es así, no os cortéis, aprenderé yo y seguro que más de uno también.
Un saludo.
PD: Esta entrada se la dedico a Rubén, que sé que le encantan los juníperos.